SANTO DOMINGO.- El diálogo entre los empresarios y los grupos sindicales que discuten un alza salarial quedó roto, ante la última propuesta hecha por el sector patronal que fue definido como un insulto, por lo que hoy hay una reunión convocada para determinar si se retoma el camino de las protestas que van desde la marcha hasta la Torre Empresarial y posteriormente una huelga general.
Rafael -Pepe- Abreu, portavoz del sector sindical, consideró ayer que los empresarios ofrecieron a los representantes de los trabajadores una proporción que a su entender es menor al 12% expresado anteriormente, porque esta vez ha hecho una discriminación descendente de un 15% a quienes ganan un sueldo mínimo de 3 mil 900 pesos; un 12 % a los que obtienen un mínimo de 4 mil 400 pesos y un 10%, a los que devengan 6 mil 400 pesos.
Al hablar con los periodistas en el local de la Central Nacional de Unidad Sindical (CNUS) Abreu dijo que la clase empresarial ha mostrado su insensibilidad en llegar a un acuerdo satisfactorio para resolver la situación de penalidad económica que viven los trabajadores en los actuales momentos.
Manifestó que ya han acudido a más de 14 reuniones con los empleadores y que se han visto en la necesidad de perder el tiempo para que no asuman sus demandas de manera seria.
Advirtió que los empresarios han promovido la ruptura del diálogo al hacer la propuesta antes citada y que ellos, los sindicalistas están dispuestos a negociar un aumento escalonado que inicie con el salario mínimo y culmine en una cifra de 30 mil pesos.
Para hoy en la mañana los representantes sindicales han organizado una reunión con todos los grupos sociales vinculados a las organizaciones, para determinar el camino de las protestas y de los reclamos, como última vía para que los trabajadores puedan ser satisfechos con salarios que vayan más acorde con la realidad que impone la situación económica general del país.
Dijo que el secretario de Trabajo, José Ramón Fadul y el coordinador del Diálogo Nacional, monseñor Agripino Núñez Collado están contemplando la necesidad de que surjan nuevas conversaciones con personalidades de mayor jerarquía en el Estado, por lo que suponen serían el presidente Leonel Fernández o su vicepresidente Rafael Alburquerque.
Estimó que no hay manera de que ellos desciendan en su posición de pedir un aumento salarial de un 25 por ciento y que sí, pueden aceptar que los empresarios propongan que se haga de manera escalonada, porque a su juicio no se trata de imponer el poder, sino de buscar una salida a la situación de los trabajadores. “Para nosotros es un insulto que se haya hecho esa propuesta, porque la misma es incluso, es inferior al 12% que habían propuesto de manera única para el salario mínimo”, agregó.
Los sindicalistas están irritados por el número de reuniones que han sostenido con los empresarios sin que se haya tomado una decisión conveniente para los intereses de la clase laboral del sector privado.
En la última reunión realizada con la mediación del rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, monseñor Núñez Collado, no hubo ningún acuerdo, debido, precisamente a que mientras los sindicalistas mantienen un 25% hasta los salarios de 30 mil pesos, los empresarios hicieron su listado de ofertas que va desde un diez a un 15% sólo en las escalas inferiores, que es lo que rechazan las organizaciones.
Abreu ponderó el trabajo de mediación de Núñez Collado, de quien explicó tiene buenas intenciones, aunque no ha podido llevar el proceso hacia una salida beneficiosa para los empleados del sector privado. Abreu se quejó del número de reuniones que han sostenido, entre ellas cuatro en el Comité de Salarios, tres en la PUCMM y otras tantas en la sede de los empresarios ubicada en la Torre Empresarial.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario