
Mientras nos dirigíamos a la boletería del tranvía mi compañera Wendy se mostraba sorprendida por la construcción de la obra, le llamaba la atención la rapidez con que fue edificada y la modernidad de la estructura. Pero sobre todo la joven y bella comunicadora, le impresionaba la organización de los pasajeros, los cuales parecían acostumbrados al nuevo sistema de transporte.
Compramos las boletas y en menos de dos minutos ya estábamos rumbo a la Feria, y la periodista higüeyana seguía con sus elogios al Metro, se preguntaba. De donde sacaron los equipos para hacer las perforaciones subterráneas? Y cuando iba a contestarle sonó una bocina avisándonos que llegamos a nuestro destino, la última parada en el Centro de los Héroes.
Me decidí ya aquí a contestar algunas de las inquietudes de mi compueblana, pero mi placentera compañera seguía admirada al ver los amplios espacios destinados a establecimientos comerciales, sobre todo le encantó la sala cultural dedicada a los héroes del 14 de junio, a la que no pudimos acceder por que en ese momento estaba cerrada.
Me encanta el Metro! exclamó Wendy Hernández. Por qué nos hacen uno hasta Higüey?, así llegaríamos más rápido a nuestra ciudad me dijo, mientras subíamos por las escaleras eléctricas. Y ya en la avenida Independencia me decido y hablo, y le digo a mi amiga de infancia, sabes colega, a mi también me gustó el Metro.